blog_es

Cómo elegir el mejor calzado para hacer el Camino de Santiago

El calzado que utilices es la elección más importante para realizar el Camino de Santiago de forma segura, evitando lesiones y dificultades innecesarias durante el trayecto. Por eso hemos escrito este artículo para ayudarte a tomar la decisión que más te convenga. Léelo en su totalidad para saber más sobre las opciones disponibles, las mejores prácticas a la hora de comprar, ¡y también algunas sugerencias sobre los mejores zapatos para hacer el Camino de Santiago!

¿Por qué hay que elegir bien el calzado al hacer el Camino de Santiago?

Responder a la pregunta de qué calzado usar para hacer el Camino de Santiago es tan sencillo como lo que sigue. Al fin y al cabo, el calzado tiene varias funciones. Unas botas o zapatillas de calidad te protegen de los peligros externos, como el sol y la lluvia, y también de los internos. Por ejemplo, la humedad que se crea en los pies cuando realizas un gran esfuerzo físico. Además, cualquier producto que utilices para proteger esta estructura ósea debe adaptarse a tus pasos.

Sí, porque cada persona camina de forma diferente. Sigue leyendo para saber más sobre el movimiento del pie y cómo debería influir en tu elección.

¿Cómo funciona la marcha? 

El acto de caminar sigue un ritmo similar en todas las personas. Suele dividirse en seis movimientos diferentes, aunque no siempre es así. Algunas personas, debido a su tipo de pie, pueden desarrollar formas más complejas de caminar. Los tipos de pies que existen son:

  • Pies planos arqueados; 
  • Pie con arco normal; 
  • Pie con arco alto. 

Cada persona modifica la forma en que esta extremidad, responsable de la movilidad, golpea el suelo. Por lo tanto, debes averiguar cómo se inclina tu pie para distribuir su peso cuando golpea el suelo. Éstas son:

  •  Supinación: Normal en pies con arco alto

La parte exterior del talón golpea el suelo en un ángulo mayor con poca o ninguna inclinación hacia dentro, lo que provoca una enorme transición de choque a través de la pata delantera.

  • Normal en pies arqueados normales

El pie se apoya en la parte exterior del talón y luego se inclina hacia dentro para absorber el impacto y soportar el peso del golpe.

  • Pronación: Normal en pies con arco plano
    El pie se apoya en la parte exterior del talón y luego se inclina demasiado hacia dentro, transfiriendo el peso hacia fuera en lugar de hacia la planta del pie. Puede provocar lesiones como canelitis, fascitis plantar e incluso juanetes.

¿Cómo puedes saber si tienes una marcha pronadora o supinadora?

Hay dos formas de hacerlo:

  1. Vigila el desgaste de tus suelas

Si te fijas en los zapatos que llevas, lo más probable es que encuentres la respuesta que buscas. Sobre todo si ya son zapatos viejos. Dicho esto, intenta identificar dónde se llevan más.

Si el exterior de tus zapatos muestra marcas de desgaste en la parte externa, entonces tienes una marcha supinadora, como el 10% de la población. En cambio, si la parte interior es la más desgastada, tienes una marcha pronadora. En este caso tampoco estás solo, ya que compartes este rasgo con el 45% de las personas. Si no notas ninguna diferencia significativa, tienes lo que se llama marcha neutra, que es la marcha más sana, ya que distribuye el peso por todo el pie.

  1. Mira tus huellas

Este método, aunque menos práctico que el anterior, es igual de eficaz. Para hacerlo necesitas tres elementos: tus pies, agua y una hoja de papel.

Puede parecer ridículo, pero basta con mojarse uno de los pies y ver qué marca deja en el papel. Así trazarás tu forma de andar, identificando las zonas en las que ejerces más presión.

Sigue estas imágenes para ayudarte a identificar los tres tipos de marcha y cuál es la tuya:


Los distintos tipos de pie y cómo éstos pueden dar lugar a una forma de escalón.

¿Qué zapatos elegir en cada caso?

Ya sean zapatillas, botas o calzado deportivo, el mercado se ha adaptado a estas diferentes situaciones, creando soluciones para cada una de ellas. Busca estas características a la hora de elegir tu calzado para el Camino de Santiago.

  • Amortiguación: adecuada para el escalón supinador
  • Control de estabilidad: adecuado para paso neutro.
  • Control del movimiento: adecuado para el paso del pronador.

Ahora que hemos visto cómo debe influir tu forma de andar en la elección de tu calzado, empecemos a pensar en la Senda.

Además de los factores que te resultan naturales, como tu forma de andar, también debes tener en cuenta la ruta que vas a seguir. Estas 3 preguntas te ayudarán a entender qué calzado es el más adecuado para ti.

El tipo de carretera que te vas a encontrar durante tu viaje es fundamental para entender qué tipo de calzado vas a necesitar para acompañarte en esta aventura. En el caso del viaje a la capital de Galicia, cada una tiene unas características diferentes. Así, todos los suelos son diferentes: en terrenos montañosos, puede ser mejor llevar botas pesadas que te den estabilidad. O, si sabes que la ruta transcurre mayoritariamente por tierra, puede que prefieras algo más ligero. Así que el primer paso es saber cuál es tu estilo de peregrinación.

  • ¿Cómo harás el Camino?

Es decir, ¿en cuántos días piensas hacerlo; llevarás o no una mochila contigo, durante la caminata, o contratarás un servicio de transporte? Si aún tiene dudas, entonces una zapatilla de senderismo podría ser justo lo que necesita, porque tiende a ser más ajustable a diferentes experiencias.

  • ¿Cuándo vas a hacer la peregrinación?

Cualquiera que haya hecho el Camino de Santiago sabe que a San Pedro le gusta mezclar las condiciones meteorológicas de la región de Galicia. La gente de esa región tiene incluso un proverbio para advertir a los nuevos en esta caminata: "En Galicia siempre llueve", puede que lo oiga durante su travesía. Por eso, elegir un calzado resistente al agua puede ser una buena opción, sobre todo si va en invierno.

¿Qué otras características importantes debe buscar en el calzado para el Camino de Santiago?

Como hemos visto anteriormente, hay numerosos factores que influyen en la elección del calzado para el Camino de Santiago. Sin embargo, aunque se trata de una decisión compleja, una mayor información puede ayudarte a hacerte una idea de lo que más te conviene. Así que ten en cuenta estos puntos:

  • Apoyo;

En las caminatas largas, el terreno es misterioso. Por eso, necesitas toda la ayuda posible para mantenerte estable durante la caminata. Esto se debe a que el terreno puede jugarte malas pasadas, aumentando el riesgo de lesiones. Un calzado sólido es el apoyo que necesitas en esos momentos.

Por ello, la suela debe ser resistente, para garantizar tu seguridad. Asimismo, la goma debe protegerte de los elementos externos, como la tierra. Al mismo tiempo, no debe ser pesada, para mantener tus pasos estables.

  • Transpirabilidad;

Cuando uno hace un gran esfuerzo físico, nuestro cuerpo desprende calor. Lo mismo ocurre cuando caminamos. Por ello, el calzado debe permitir la ventilación necesaria para que los pies no se calienten demasiado, concentrando la humedad.

Es el principal responsable de las terribles ampollas que tan a menudo sufren los peregrinos. Por ello, el tejido debe ser capaz de absorberla manteniendo una temperatura saludable.

  • Peso;

En la ruta de los millennials, cada kilo cuenta. Así que el peso de los zapatos es un factor importante a la hora de elegirlos. Esto se debe a que cuanto más pesado sea el par de zapatos, más dura será la aventura.

Sin embargo, siempre existe el reverso de la medalla, porque son las que más pesan las que ofrecen mayor protección frente al medio exterior. Por ejemplo, las zapatillas de correr permiten mayor ligereza, sobre la travesía, pero menor seguridad.

Así que lo importante es encontrar un equilibrio con el que te sientas cómodo. Por eso también, antes de la travesía a Santiago de Compostela, debes prepararte, sobre todo si no estás acostumbrado a caminar.

  • Amortiguación;

La presión que ejerce un simple paso es suficiente para influir en todo el funcionamiento del cuerpo, impactando en articulaciones tan sensibles como las rodillas. Por eso, cuanto mejor preparado esté tu calzado para absorber este "choque", más improbable será que sufras lesiones o dolores al final del día.

  • Comodidad;

Más adelante, obtendrás una pequeña lista que te ayudará a elegir el calzado más cómodo.

Además de la seguridad, es necesario que tu calzado se adapte cómodamente a tu pie para que disfrutes de este increíble viaje por el sendero hasta la capital de Galicia. Esto implica tener en cuenta la sensación térmica, la facilidad de movimiento de la estructura ósea y el espacio disponible para evitar que tu piel roce con el tejido. Al fin y al cabo, este último punto es el principal causante de las ampollas.

  • Durabilidad:

El calzado para el Camino de Santiago es una inversión y, como tal, debe durar mucho tiempo. Es importante porque el viaje es largo y debes tener la seguridad de que no te quedarás sin la tan necesaria protección a mitad del camino.

  • Protección:

Por último, el objetivo primordial del calzado es protegerte de las condiciones del camino. En esta antigua ruta, no es diferente, ya que te encuentras con una variedad de terrenos diferentes, como hemos mencionado antes, cada uno con sus características únicas. 

¿Qué tipos de calzado hay disponibles?

Con tantas sugerencias, es posible que se pregunte: ¿cuáles son mis opciones, después de todo? No se preocupe, le daremos algunas sugerencias, junto con los pros y los contras de cada una, para que pueda elegir con conocimiento de causa.

Botas: 

Son el primer tipo de calzado que viene a la mente cuando se empieza a considerar el senderismo. Sin embargo, a pesar de ser una opción sólida y muy utilizada por muchos peregrinos, también tienen sus inconvenientes, ya que pueden resultar demasiado pesadas para los principiantes.

No obstante, son excelentes para las épocas más frías, cuando la lluvia es frecuente. Además, proporcionan una mayor estabilidad, permitiéndote afrontar con confianza el sendero, ya esté mojado, seco o incluso embarrado.

Pros: 

  • Los talones tienen más apoyo en terrenos accidentados y cuando se llevan mochilas.
  • Proporcionan mayor estabilidad.
  • Duran más.
  • La mayoría son resistentes al agua.

Contras:

  • Más pesado que las otras opciones.
  • Menos flexibles que los entrenadores, por lo que se necesita un periodo de adaptación más largo.
  • No permiten que el pie respire.

 Nuestras sugerencias:

Tanto por tan poco. Con un buen agarre, se adapta a la forma de tu pie, favoreciendo una zancada cómoda durante todo el viaje. Además, la lluvia de Galicia ya no será un problema. La eficaz impermeabilización de este producto ayuda a mantener los pies secos, incluso si estás haciendo el Camino hacia las altas montañas de la Serra da Estrela durante los meses de nieve.

Para los que necesitan una buena bota a un precio razonable, ha llegado la MH500. Te mantiene caliente cuando peregrinas durante los meses de invierno y te ofrece comodidad para esos largos tramos del viaje. Quienes la llevan saben que llegan a su destino con los pies en buenas condiciones.

Las botas están diseñadas para llevarlas (mucho) puestas. Amortiguan cada paso en cualquier terreno, permitiéndote emprender el Camino de Santiago, llueva o haga sol. Además, son tan cómodas que te sentirás a gusto de inmediato.

Zapatillas:

Ideales para un viaje rápido a la panadería o incluso a la capital de Galicia. En comparación con las zapatillas de correr, son notablemente más pesadas, pero nunca hasta el punto de asemejarse a unas botas. Robustas y estables, tienden a ser más duraderas que otras opciones, sin dejar de ser flexibles en su uso. Excelentes para los que entienden que no están en una carrera y quieren saborear cada momento del viaje con seguridad.

Pros:

  • Protegen los pies más que las zapatillas.
  • Son flexibles y requieren menos tiempo de adaptación.
  • Cierta estabilidad en el suelo.

Contras:

  • Sin soporte para el talón.
  • Menos duraderas que las botas.

Nuestras sugerencias: 

La opción perfecta para quienes gustan del calzado ligero. En verano, mantienen los pies frescos, evitando el exceso de humedad y, en consecuencia, las ampollas. Además, ¡son preciosas!

Su diseño moderno pero discreto es sólo una de las cualidades de este calzado de montaña. Tanto si te encuentras en un terreno frío y lluvioso como en el calor abrasador del verano ibérico, este zapato te protegerá. Además, se adapta a tu pie, de forma cómoda, para que puedas llegar más lejos.

Comodidad, agarre y resistencia. Con estas palabras trabaja Merrel sus zapatillas de senderismo. Porque quienes conocen el mundo de los senderos saben que estos compañeros de travesía tienen que ser ligeros para ayudarte a llegar más lejos, pero resistentes para aguantar tu paso.

Zapatillas deportivas o de trail running

Cada vez más gente opta por las zapatillas de atletismo, y por una buena razón. Ligeras y cada vez más resistentes, son una buena opción para quienes quieren hacer la travesía sin pesas.

Pros: 

  • Ligero y básicamente no requiere tiempo de adaptación.
  • Permiten que el pie respire.

Contras: 

  • Sin soporte para el talón;
  • Menos duraderas que las botas;
  • La mayoría no son resistentes al agua.

Nuestras sugerencias: 

Fabricadas con materiales duraderos, están preparadas para que completes todo el Camino de Santiago portugués desde Lisboa y vuelta, sin que te pesen los pies. Además, son tan flexibles que incluso los pies más anchos pueden moverse sin dificultad.

Con esta zapatilla de running, tus pasos no te dejarán en el suelo. Su suela dura te da la estabilidad que necesitas para hacer el monte Labruja y bajar a Redondela sin ningún accidente. Merece la pena invertir en buenas marcas.

No dejes que su aspecto duro te engañe, estas zapatillas de running son pequeñas nubes en tus pies. Los peregrinos experimentados las recomiendan a cualquiera que disfrute haciendo largas caminatas.

Sandalias

Puede parecerlo, pero no has vuelto a los inicios del Camino de Santiago. Las sandalias son una buena opción para las personas a las que les salen ampollas en los pies con facilidad. Esto se debe a que permiten la salida del aire caliente, sin que quede atrapado en el tejido.

Pros: 

  • Menos posibilidad de ampollas;
  • Luz.

Contras: 

  • Las hebillas pueden doler;
  • Los pies están más expuestos a los elementos;
  • Menos resistentes. Si la hebilla se rompe, te quedas sin zapatos.

Nuestras sugerencias: 

Cómodas, ligeras y frescas: estas sandalias tienen todo lo que necesitas para recorrer cómodamente el Camino de Santiago. Enfréntate a las ampollas con un calzado que, con un aspecto elegante, se adapta a tu pie.

Hechos de un material resistente y duradero, pueden soportar todas las rutas de Santiago que quieras hacer. Al mismo tiempo, proporcionan estabilidad al caminar y amortiguan los golpes de tus pasos.

Puedes llevarlos a la playa, al trabajo o a la capital de Galicia. Además de cómodas, son versátiles. Su look moderno viene acompañado de la tecnología adecuada para estabilizar tus pasos en el camino milenario.

5 consejos para elegir el calzado que más te conviene

Ahora que ya lo sabes todo sobre los distintos tipos de calzado adecuados para el Camino de Santiago, te dejamos algunas sugerencias más. Ya sean botas o deportivas, lo importante es que te sientas cómodo. ¡No olvides que tienes muchos kilómetros por delante!

  1. En primer lugar, debes saber cuál es tu talla. Dependiendo de la marca, esto puede cambiar, así que pruébatelo siempre antes. Además, no sólo debes pensar en la longitud de tu pie, sino también en su altura. Así conseguirás unos zapatos cómodos y adecuados para ti.
  2. Al final del día se te hinchan los pies. Así que cuando lo intentes, procura hacerlo al atardecer.
  3. Intenta averiguar si el pie se ajusta cómodamente al zapato. Utiliza la técnica que todos conocemos, colocar el pulgar en la punta del zapato. No debe estar ni demasiado cerca ni demasiado lejos de la punta.
  4. Date una vuelta por la tienda para saber si te gusta cómo te sienta. Piensa en la comodidad y el peso para ayudarte.
  5. Empieza a practicar con tu nueva adquisición mucho antes de tomar la ruta milenaria.

¿Qué te falta para iniciar el Camino Portugués de Santiago?

Ahora que ya sabe cómo elegir el mejor calzado para recorrer el Camino de Santiago, sólo le queda empezar a planificar su aventura. Utilice nuestro sitio web para reunir toda la información necesaria y emprender el Camino de Santiago portugués.

Si necesitas compañía, debes saber que nunca estás solo en el camino. De hecho, ni siquiera antes, ya que contamos con una increíble comunidad de más de 70.000 personas dispuestas a ayudarte a recorrer los caminos que llevan a Santiago de Compostela.

Únase a nosotros en: https: //www.facebook.com/groups/caminhoportuguesdesantiago/

Dejar un comentario

Su dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos marcados con * son obligatorios